domingo, 23 de marzo de 2014

Panorama Bíblico





Introducción

¿QUÉ ES LA BIBLIA?

La palabra "Biblia" se emplea para designar las Escrituras del Antiguo y el Nuevo Testamentos, reconocidas y utilizadas por las iglesias cristianas. El judaísmo sólo reconoce las Escrituras del Antiguo Testamento.  Otras religiones, tales como el budismo (China y otros países derivados como Japón, Corea del Norte y del Sur, Taiwán y otros), el hinduismo (La India), el zoroastrianismo (Algunos países árabes como Irán),  y el islamismo (la mayoría de los países del Medio Oriente y algunos del África como Nigeria), tienen también sus escritos “sagrados”.

Pero hay una sola Biblia: única e incomparable, frente a los demás escritos "sagrados".
¿Por qué La Biblia es Única?
1.    Su REVELACION. es la revelación de Dios;
2.    Su INSPIRACION.  "inspirada por él" (2 Ti. 3.16) en un sentido muy distinto de la inspiración de las obras literarias;
3.    Su PROPÓSITO. revela los planes y propósitos de Dios para el tiempo y la eternidad;
4.    Su TEMA CENTRAL. se centra en Dios encarnado en Jesucristo, el Salvador de la humanidad (He. 1.1-2).
5.    Su INDESTRUCTIBILIDAD material e inmaterial. Mateo 24:35, Marcos 13:31, Lucas 21:33. I Pedro 1:25.
6.    Su UNIVERSALIDAD. Dios prometió que Su Palabra cubrirá toda la tierra, es decir, en toda la tierra llegaría a ser expuesta y predicada Su Palabra. Habacuc 2:14, Salmo 19:4, Romanos 10:18.
7.    Su POTENCIA. Hebreos 11:3,
8.    Sus RESULTADOS. Revelan a Cristo Jesús al hombre y éste es TRANSFORMADO, renacido, regenerado por La Palabra de Dios.  Juan 5:39, Salmo 19.7-8,  Santiago 1:18, I Pedro 1:23.
9.    Su CERTEZA infalible e irrefutable. La Biblia contiene la historia, el presente y el futuro de la humanidad.  En ella se encuentra todo el escenario profético de los tiempos que ya vivimos y de los días que le quedan al ser humano en este envejecido planeta tierra.  Apocalipsis 1:19,  II Pedro 3:7, II Timoteo 3.1-4.
A.   Al revisar el contenido profético de La Palabra, hasta el más simple o sencillo puede CONFIRMAR que Las PREDICCIONES de La Palabra de Dios son VERDADERAS.
B.   Dios, en Su Palabra, La Biblia, ANTICIPA las cosas que YA HAN sucedido y las que HAN DE SUCEDER, sean tiempos buenos o malos para la humanidad.


SIGNIFICADO DE LA PALABRA "BIBLIA"
La palabra biblia es griega, y quiere decir libros. Es un diminutivo de biblos (libro) que es la corteza interior del junco llamado papiro, un antepasado de nuestro papel moderno, y del cual se hacían los libros o rollos. Daniel 9.2 hace referencia a los escritos del Antiguo Testamento empleando la expresión "los libros" {la biblia en el griego). La evolución del término Biblia del plural al concepto singular puede considerarse como providencial, pues subraya la unidad de los 39 libros del Antiguo Testamento y los 27 del Nuevo.


TÍTULOS DADOS POR LAS ESCRITURAS A LA BIBLIA
Nuestro Señor al referirse al A.T. generalmente lo llamaba "las Escrituras" (Mat. 21.42; Mr. 14.49; Jn. 5.39). Sus seguidores hicieron lo mismo (Lc. 24.32; Hch. 18.24; Ro. 15.4). Pablo habla de "las Sagradas Escrituras" (II Ti. 3.15), "las santas Escrituras" (Rom. 1.2). En una oportunidad Jesús se refirió a ellas como "la ley de Moisés, los profetas y los salmos" (Lc. 24.44), un eco de la disposición formal de los libros en el hebreo. Una designación más breve del AT es "la ley y los profetas" (Mt. 5.17; 11.13; Hch. 13.15). Más breve aún es el término "ley" que comprende las demás divisiones (Jn. 10.34; 12.34; 15.25; 1 Co. 14.21).
En estos últimos se encuentran las epístolas de Pablo a las cuales se refiere Pedro como "Escrituras" (II P. 3.16).

LOS TÉRMINOS "ANTIGUO TESTAMENTO" Y "NUEVO TESTAMENTO"
Desde fines del siglo II los términos "Antiguo Testamento" y "Nuevo Testamento" han sido empleados para diferenciar las Escrituras hebreas de las cristianas. La colección formal de escritos cristianos hecha en la segunda mitad del siglo II, fue denominada Nuevo Testamento. Esta colección fue puesta junto a los libros canónicos hebreos como igualmente inspirada y con la misma autoridad.
Las Escrituras hebreas fueron entonces denominadas "Antiguo Testamento". Tertuliano, uno de los padres latinos de la Iglesia ( año 200 d. C.), empleó por primera vez el término "Novum Testamentum", que luego se generalizó cristalizándose el concepto de una Biblia cristiana.

Aplicados a las Escrituras, los términos Antiguo Testamento y Nuevo Testamento significan estrictamente Antiguo y Nuevo Pactos. El pacto (hebreo berith; griego diathéke) es una continuación de la designación veterotestamentaria de la Ley mosaica, el libro del pacto (II R. 23.2). Pablo lo emplea en este sentido al hablar de "leer el antiguo pacto" (II Co. 3.14).

LOS IDIOMAS DE LA BIBLIA
Casi todo el A.T. fue escrito en hebreo, dialecto semítico semejante al fenicio y al ugarítico. Las únicas porciones escritas en arameo, otro dialecto semítico afín al hebreo, son Esd. 4.8—6:18; 7.12-26; Dn. 2.4—7.28 y Jer. 10.11.
El N.T. fue escrito totalmente en griego. La arqueología ha demostrado que el griego del NT era el lenguaje común de uso diario (Koiné) en el mundo grecorromano de la época.

LOS ESCRITORES DE LA BIBLIA.
Esencialmente, por encima de los autores humanos, la Biblia fue escrita por Dios. 2 Timoteo 3:16 nos dice que la Biblia fue “inspirada” por Dios. Dios supervisó a los autores humanos de la Biblia para que, aunque utilizaban sus propios estilos de escritura y personalidades, registraran exactamente lo que Dios quería que se escribiera. La Biblia no fue dictada por Dios, sino que fue perfectamente guiada y enteramente inspirada por Él.

Humanamente hablando, la Biblia fue escrita por aproximadamente 40 hombres de diversas procedencias, a través de un período de 1600 años. Isaías fue un profeta, Esdras fue un sacerdote, Mateo fue un cobrador de impuestos, Juan fue un pescador, Pablo fue un fabricante de tiendas, Moisés fue un pastor. A pesar de haber sido escrita por diferentes autores a través de 16 siglos, la Biblia no se contradice a sí misma, tampoco contiene error alguno. Todos los autores presentan diferentes perspectivas, pero todos ellos proclaman al mismo único y verdadero Dios, y el mismo único camino para la salvación – Jesucristo (Juan 14:6; Hechos 4:12). Pocos libros de la Biblia nombran específicamente a su autor. Estos son los libros de la Biblia, junto con el nombre de quien la mayoría de los eruditos bíblicos asumen que es el autor, así como la fecha aproximada de su autoría:

·         Génesis, Éxodo, Levítico, Números, Deuteronomio = Moisés – 1400 a.C.
·         Josué = Josué – 1350 a.C.
·         Jueces, Rut, 1 Samuel, 2 Samuel = Samuel / Natán / Gad – 1000 – 900 a.C.
·         I Reyes, II Reyes = Jeremías – 600 a.C.
·         I Crónicas, II Crónicas, Esdras, Nehemías = Esdras – 450 a.C.
·         Ester = Ester y/o Mardoqueo – 400 a.C.
·         Job = Moisés 1400 a.C.
·         Salmos = muchos diferentes autores, principalmente David, y otros atribuidos a Moisés y a Jafet. – 1000 – 400 a.C.
·         Proverbios, Eclesiastés, Cantares = Salomón – 900 a.C.
·         Isaías = Isaías – 700 a.C.
·         Jeremías, Lamentaciones = Jeremías – 600 a.C.
·         Ezequiel = Ezequiel – 550 a.C.
·         Daniel = Daniel – 550 a.C.
·         Oseas = Oseas – 750 a.C.
·         Joel = Joel – 850 a.C.
·         Amós = Amós – 750 a.C.
·         Abdías = Abdías – 600 a.C.
·         Jonás = Jonás – 700 a.C.
·         Miqueas = Miqueas – 700 a.C.
·         Nahúm = Nahúm – 650 a.C.
·         Habacuc = Habacuc – 600 a.C.
·         Sofonías = Sofonías – 650 a.C.
·         Hageo = Hageo – 520 a.C.
·         Zacarías = Zacarías – 500 a.C.
·         Malaquías = Malaquías – 430 a.C.
·         Mateo = Mateo – 55 d.C.
·         Marcos = Juan Marcos – 50 d.C.
·         Lucas = Lucas – 60 d.C.
·         Juan = Juan – 90 d.C.
·         Hechos = Lucas – 65 d.C.
·         Romanos, I Corintios, II, Corintios, Gálatas, Efesios, Filipenses, Colosenses,          I Tesalonicenses, II Tesalonicenses, I Timoteo, II Timoteo, Tito, Filemón          = Pablo 50 – 70 d.C.
·         Hebreos = desconocido, principales posibles son Pablo, Lucas, Bernabé, o Apolos – 65 d.C.
·         Santiago = Santiago – 45 d.C.
·         I Pedro, II Pedro = Pedro – 60 d.C.
·         I Juan, II Juan, III Juan = Juan – 90 d.C.
·         Judas = Judas 60 d.C.
·         Apocalipsis = Juan – 90 d.C.







ORDEN DE LOS LIBROS EN EL ANTIGUO TESTAMENTO HEBREO
Los libros canónicos en la Biblia hebrea están dispuestos en una división triple:
1.    La Ley (Torah),
2.    Los Profetas (Nebhiim) y
3.    Los Escritos (Kethubhim).

Esta división es antigua y se la puede deducir del prólogo del libro apócrifo Eclesiástico. Fue conocida por Filón y citada por nuestro Señor Jesucristo (Lc. 24.44). Es evidente que durante los primeros siglos del cristianismo algunos libros fueron trasladados de la segunda sección a la tercera. La forma en que ha llegado hasta nosotros desde el período masorético (600-900 a.C.) es la siguiente:
1.    La Ley (Torah), 5 libros: Génesis, Éxodo, Levítico, Números, Deuteronomio.
2.    Los Profetas (Nebhiim), 8 libros Primeros Profetas, 4 libros: Josué, Jueces, Samuel, Reyes Últimos Profetas, 4 libros: Isaías, Jeremías, Ezequiel, los Doce 3. Los Escritos, 11 libros: Libros Poéticos, 3 libros: Salmos, Proverbios, Job Los Rollos (Megilloth), 5 libros: Cantares, Rut, Lamentaciones, Eclesiastés, Ester Libros Profético-Históricos,
3.    Los libros: Daniel, Esdras-Nehemías, Crónicas.

LOS 39 LIBROS DEL ANTIGUO TESTAMENTO. (Orden de la Biblia en castellano)
1.    Históricos (17 libros). Génesis – Ester.
2.    Poéticos (5 libros). Job – Cantares.
3.    Proféticos (17 libros). Isaías – Malaquías.

LOS 27 LIBROS DEL NUEVO TESTAMENTO. La clasificación más idónea sería:
1.    Biográficos Pedagógicos (4 libros). Mateo – Juan.
2.    Histórico (1 libro). Hechos.
3.    Cartas Apostólicas. (21 cartas). Romanos – Judas.  
4.    Profético. (1 libro). Apocalipsis.


LA AUTORIDAD DE LA BIBLIA
La autoridad reside en la Palabra inspirada de Dios, la Biblia, interpretada por el Espíritu Santo  obrando a través de agentes humanos enseñados por el mismo Espíritu. El protestantismo ortodoxo difiere del catolicismo al sostener que no existe, aparte de las Escrituras canónicas, ninguna otra autoridad que sea voz del Espíritu Santo. Durante la Edad Media la iglesia de Roma concentró en sí misma por medio de su episcopado toda la autoridad de la tradición, los obispos, los concilios, y cualquier otra cosa que dominara la mente de la iglesia. Este movimiento culminó en el decreto de la infalibilidad papal, que sostiene que "el Pontífice romano, hablando, ex-cathedra, posee esa infalibilidad de que el divino Redentor dotó a su iglesia, al definir una doctrina de fe o de moral."

Pero la infabilidad no se atribuye a la Iglesia en general, ni a ninguna en particular, sino a La Palabra de Dios, siendo Dios el Único Infalible.


 CRISTO COMO TEMA UNIFICADOR DE LA BIBLIA

Aunque la Biblia contiene 66 libros, 39 en el AT y 27 en el NT, es, no obstante, un solo libro. El tema unificante de las Escrituras es Cristo.

El AT prepara el camino para Cristo y lo predice en tipología y en profecía.

Los Evangelios lo presentan como Redentor en Sus manifestaciones divinas y humanas.

Los Hechos lo presentan como el Sujeto de la predicación, y a Su evangelio propagándose por todo el mundo.

Las cartas apostólicas (epístolas) exponen Su obra redentora.

Apocalipsis revela a Cristo como la consumación de todos los planes y propósitos de Dios. De "la simiente de la mujer" (Gn. 3.15), prometida en el paraíso perdido, hasta "el Alfa y la Omega" (Ap. 22.13), que se hace realidad en el paraíso reconquistado, Él es "el principio y el fin", "el primero y el postrero", en los planes revelados de Dios para con el hombre.


SUBSTANCIA DE LA BIBLIA
La Biblia fue dada como testimonio del Dios único, Creador y Sustentador del universo, por medio de Cristo, Redentor del hombre pecador.

Presenta un relato continuo: la historia de la redención humana. Dicha historia es el desarrollo progresivo de aquella verdad central de la Biblia de que Dios en Sus consejos eternos iba a encarnarse en Jesucristo, para la redención del hombre caído. El desarrollo de esta verdad central de la redención se da a conocer por medio de la historia, la profecía, los tipos y los símbolos. Esta revelación de la redención humana por Cristo, orienta al hombre en el contexto mayor de los planes que tiene Dios para él en las edades del tiempo, como también los propósitos divinos para la eternidad.


TIPOLOGÍA DE LA BIBLIA

Definición. Un tipo (del griego typos, "marca o señal que deja un golpe; patrón o huella").     Es una representación doble en acción, en que lo literal se dice con la intención de que represente lo espiritual. Un tipo es así la huella divina de la verdad espiritual sobre un suceso, persona o cosa literales. Bien entendida y apreciada, la tipología ofrece una convincente prueba de la inspiración divina. En realidad es el programa de redención de los siglos, introducido hábilmente en la trama de las Escrituras por Dios mismo.

 Un TIPO BÍBLICO  se refiere al estudio de diversos temas, sucesos, personas u objetos del Antiguo Testamento, que son considerados como "sombra" de lo que había de venir en el Nuevo Testamento.

Hay tres características para identificar un tipo que realmente se presenta como tal, de manera expresa, en las Escrituras:
1)        Es figura de alguna realidad espiritual futura, preparada por inspiración divina; lo que quiere decir que son proféticos, y no son meras ilustraciones.
2)        Representa alguna realidad espiritual futura, que se había de manifestar plenamente tras la venida de Cristo.
3)        Su cumplimiento es el ANTITIPO.  Antitipo porque la persona, evento, lugar o circunstancia que realiza o se realiza el cumplimiento es el fin del TIPO.  No es ANTITIPO porque sea opuesto al TIPO, sino porque en la persona, evento, lugar o circunstancia CONCLUYE el TIPO y ya NO HAY más lugar para un doble cumplimiento.

Por extensión, no todas las Escrituras tienen igual elemento tipológico. El libro de Hebreos es un testimonio del NT al simbolismo concentrado del Pentateuco y Josué. Del mismo modo, el libro de Rut, debido a su ilustración del Pariente-Redentor y de la verdad de la redención, tiene un significado típico más profundo que el de una simple historia de amor. En I Cor. 10.11 encontramos una base neotestamentaria para la rica tipología del Pentateuco. "Y estas cosas les acontecieron [es decir a Israel en el desierto] como ejemplo [griego tupikós, típicamente o como tipo] y están escritas para amonestarnos a nosotros, a quienes han alcanzado los fines de los siglos."

PROPÓSITO. La tipología, como el obrar divino de los propósitos de Dios en las Escrituras, es un medio de hacer que la Palabra de Dios sea relevante para todos los tiempos y situaciones. Ya que Jesucristo es el tema constante de las Escrituras, Su persona y Su obra han quedado impresas divinamente en ellas por medio de tipos, símbolos y profecías.

VARIEDADES DE TIPOS.

1.       Personas típicas, como Caín, tipo del hombre natural, carente de un sentido adecuado del pecado o de la expiación (Gn. 4.3; 2 P. 2.1-22; Jud. 11). Abel, por contraste, es un tipo del hombre espiritual, cuyo sacrificio de sangre (Gn. 4.4; He. 9.22) demostró su sentimiento de culpabilidad de pecado, y su confianza en un sustituto. De un modo parecido, numerosos santos del AT tipifican algún aspecto del Mesías o alguna faceta de la redención. Para el caso, David, en algunas facetas de su vida, tipifica a Cristo, especialmente en algunos Salmos, cuando hablando de sus experiencias espirituales y de las ligadas a su humanidad, proyecta La Persona de Cristo; tal es la muestra de ello en el Salmo 22 (todo el capítulo).

1.       Instituciones típicas, tales como el ritual levítico, en el que hay una concentración de tipologías. Por ejemplo, todo el ritual levítico en que corderos u otros animales eran sacrificados para expiar el pecado (Lv. 17.11), prefiguraba al Cordero de Dios (Jn. 1.29; He. 9.28; 1 P. 1.19). La pascua (Lv. 23) presentaba a Cristo nuestro Redentor (1 Co. 5.6-8).

2.       Sucesos típicos, que incluyen el diluvio, el éxodo, la travesía del desierto, el maná, la serpiente de bronce, la conquista de Canaán.

3.       Los oficios típicos incluyen a profetas, sacerdotes y reyes. Por ejemplo, Moisés, como profeta, era tipo de Cristo (Dt. 18.15-18; Jn. 6.14; 7.40). (5)

4.       Las acciones típicas incluyen la experiencia de Jonás con el gran pez, tipo profético de la sepultura y resurrección de nuestro Señor (Mt. 12.39).


EL TIPO COMO PROFECÍA. Con frecuencia se ha dicho que la tipología es una especia de profecía. Es cierto, pero el sentido típico quizá no se dé a conocer en la época en que aparece el tipo. Gran parte de la tipología del AT se refiere a sucesos y verdades acerca de un período que no fue revelado a los videntes del AT (Mt. 13:11-17), de modo que puede afirmarse que este período, al que denominamos la era de la iglesia, aunque no fue revelado a los profetas del AT, no obstante quedó estampado en las instituciones, personas y cosas por medio de la acción omnisciente del Espíritu Santo. Por esta razón el ritual, las instituciones y las experiencias del AT tienen interés y valor instructivo para los santos del NT. Cuando se comprende y aprecia debidamente este hecho, resulta una prueba maravillosa de la paternidad literaria divina de las Escrituras, lo que hace que ellas sean prácticas y omnitemporales en sus enseñanzas y en sus relaciones diarias. 





Cronología Bíblica del Antiguo Testamento

Para obtener un panorama general de La Biblia, es necesario plasmar un orden cronológico de la misma. La siguiente lista es adaptada de La Cronología de la Biblia. Su propósito es ayudar a desarrollar su entendimiento global del orden de las personas y eventos importantes de la Biblia. Las fechas se encuentran en disputa; pero en general, estas pueden darle una referencia en tiempo y en orden.

La Preexistencia de Cristo
La Creación
Satanás  expulsado del cielo
Los seis días de la creación
El Huerto del Edén
La caída de Adán y Eva
La expulsión del Edén
Caín mata a Abel
Nacimiento de Noé
El Diluvio
Juan 1
Ge 1:1
Is 14:12-17
Ge 1:3-26
Ge 2:8-17
Ge 3:1-7
Ge 3:21-24
Génesis 4
Ge 5:28-29
Ge 7:10-24
Desde la Creación hasta el Diluvio
La Torre de Babel
Nacimiento de Abram (Abraham)
Job
Abram se convierte en Abraham
Nacimiento de Isaac, de Jacob y de
José
Génesis 11
Ge 11:27
Job 1
Génesis 17
Génesis 21-30
Desde el Diluvio
hasta los Patriarcas
Las 10 plagas contra Egipto
Los Hebreos son liberados y después perseguidos
Cruzando el Mar Rojo
Recibiendo los 10 Mandamientos
Israel vaga en el desierto por 40 años
Éxodo 7 - 11
Éxodo 12
Éxodo 13 - 15
Éxodo 20
Números 14
Desde el Éxodo hasta Entrar a Canaán
1462 - 1422 A.C.
La conquista y división de Canaán
Israel se convierte en poderosa nación
Nacimiento de Sansón
Saúl se convierte en el primer Rey
Josué 6 - 12
1200 - 750 A. C.
Jueces 13
1º Samuel 9
Desde Canaán hasta el Reinado del Rey Saúl
1422 - 1065 A. C.
David y Goliat
David se convierte en Rey
David con Betsabé
La rebelión de Absalom
David prepara los materiales del templo
1º Samuel 17
2º Samuel 5
2º Samuel 11
2º Samuel 15-18
1º Crónicas 22
EL Reino de David
1025 - 985 A. C.
Salomón se convierte en Rey
Salomón le pide a Dios sabiduría
La construcción del Templo
La caída de Salomón
1º Reyes 1
1º Reyes 3
1º Reyes 6
1º Reyes 11
El Reino del Rey Salomón
985 - 945 A. C.
La nación de Israel es dividida en dos: Israel al norte y Judá al sur. Este período estuvo lleno de reyes, los cuales gobernaron cada uno de los reinos. Muchos de estos reyes fueron malvados. Otros, relativamente buenos adoraron en ocasiones. Durante este tiempo Elías tuvo su ministerio; Oseas predicó; Jonás trató con Nínive; Roma fue fundada y el Templo restaurado.
La División del Reino
(Israel y Judá)
Desde Salomón hasta la Caída de Israel
945 - 586 A. C.
Tanto Israel como Judá cayeron ante poderes extranjeros. Miqueas profetiza. Isaías es martirizado. Nacen Jeremías y Daniel. Sofonías profetiza. Nace Ezequiel. Jeremías profetiza.
Desde la Caída de Israel hasta la Caída de Judá
721 - 586 A. C.
Ezequiel profetiza la caída de Jerusalén
La imagen de Nabucodonosor
La visión de Daniel de las cuatro bestias
La visión de Daniel de las 70 semanas
La caída de Babilonia ante los Persas
Ezequiel 33
Daniel 3
Daniel 7
Daniel 9
Isaías 13, Jeremías 25
Israel es llevada
a Cautividad
586 - 516 A.C.
La Dedicación del Templo
La Liberación de los Judíos
Esdras se prepara para regresar a Jerusalén
La construcción del muro de Jerusalén
Las Profecías de Malaquías
Esdras 6
Esther 8
Esdras 7
Nehemías 2
Malaquías
Desde la Cautividad
hasta la Restauración
516 -400 A. C.
Grecia es el poder en el mundo
Roma es el poder en el mundo
Dios deja de hablar por cerca de 400 años
331 - 168 A. C.
168 A. C. - 476 D.C.
Tiempo Entre
Los Testamentos
400 A. C. - 5. D.C.

UN RECORRIDO RÁPIDO POR EL ANTIGUO TESTAMENTO
Una estructura paralela

...Dios no es Dios de confusión... I Cor 14.33.  Dios es un Dios de orden, no de confusión. Así que, no es una sorpresa que podemos ver una estructura ordenada en el Libro que Él inspiró y preservó. Puesto que el Señor es el autor de ambos Testamentos de nuestra Biblia, podemos ver una unidad en la estructura de los libros que los dos contienen. O sea, los libros de ambos Testamentos siguen la misma estructura. Es una “estructura paralela”. Tanto el Antiguo Testamento como el Nuevo empiezan con un “Adán” que llega a ser la cabeza de una nueva raza.

En el Antiguo Testamento, el primer Adán llegó a ser la cabeza de la raza humana porque de Adán vienen todos los seres humanos que han existido en este planeta. En el Nuevo Testamento, el Postrer Adán, Jesucristo, llegó a ser la Cabeza de la Iglesia y de una nueva raza de criaturas que se llaman “hijos de Dios”. Hay un paralelo entre los dos Testamentos porque los dos empiezan con un “Adán” que es cabeza y representante de una nueva raza.
Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados. (I Cor. 15.22)

Así también está escrito: Fue hecho el primer hombre Adán alma viviente; el postrer Adán, espíritu vivificante. (I Cor. 15:45)

Además, ambos Testamentos empiezan con un fundamento de libros históricos que forman la base de todo lo demás que sigue después de ellos.

El Antiguo Testamento empieza con los cinco libros de Moisés que se llaman el Pentateuco: Génesis, Éxodo, Levítico, Números y Deuteronomio. Estos libros tratan de la creación y del comienzo de la historia de Israel, el pueblo escogido de Dios.

El Nuevo Testamento empieza con los cuatro libros de Jesús que se llaman los Evangelios: Mateo, Marcos, Lucas y Juan. Tratan del Creador hecho hombre y del comienzo de la historia de la Iglesia, el Cuerpo de Dios. (Los Evangelios registran la “concepción”, porque ella no “nace” hasta Hechos 2 y la venida del Espíritu.) Estos libros históricos forman un fundamento sobre el cual todo lo demás de ambos Testamentos se edifica. Después de los primeros libros de historia en los dos Testamentos se destaca una transición sumamente importante.

En el Antiguo Testamento esta transición toma lugar entre un juego de libros y otro. El conjunto de los libros de Josué a Ester tiene una aplicación específica porque todos se tratan solamente de Israel. Después de Ester, sin embargo, una transición toma lugar y en los libros de Job a Cantar de los Cantares vemos una aplicación general de principios universales que cualquiera puede aplicar (no sólo Israel).

Así se da la transición en el Antiguo Testamento de lo específico (sólo para Israel) a lo general (principios para todos). La transición del Nuevo Testamento toma lugar dentro de un solo libro: el Libro de Hechos. La primera parte de este libro (los capítulos del 1 al 12) tiene una aplicación específica porque se trata de Israel y el último ofrecimiento del reino a los judíos. La segunda parte de Hechos (del capítulo 13 al 28) tiene una aplicación general del evangelio universal para todo el mundo (tanto para el judío como para el gentil; Rom 1.16). Así que, después de unos libros históricos en ambos Testamentos hay una sección durante la cual una transición importante toma lugar. Por último, los dos Testamentos terminan con una enseñanza que sirve para instruir al pueblo de Dios y además para predecir el futuro del reino del Señor.

En el Antiguo Testamento los libros proféticos (de Isaías a Malaquías) contienen esta enseñanza y la predicciones acerca del reino futuro. Se puede dividir estos libros en dos grupos, el primero es el de los profetas mayores (porque son de mayor tamaño) de Isaías a Daniel y el segundo es el de los profetas menores de Oseas a Malaquías.

En el Nuevo Testamento vemos la enseñanza y las predicciones en dos grupos también. El primero grupo consta de las epístolas cristianas de Romanos a Filemón y el segundo de las epístolas hebreas de Hebreos a Apocalipsis. Todos estos libros contienen una enseñanza que Dios le manda a Su pueblo y muchas predicciones acerca del futuro del reino. Dios es el Autor de la Escritura, entonces puesto que Él es un Dios de orden, así es Su Libro también. Este orden divino se ve en la estructura paralela de los dos Testamentos.

El Antiguo Testamento
El Nuevo Testamento
1.       Adán: Cabeza de la raza human
2.       Fundamento histórico: El Pentateuco
·         Los cinco libros de Moisés
3.       Transición: de Israel a todos
·         (Jos-Est) Aplicación específica: para Israel
·         (Job-Cant) Aplicación general: para todos
4.       Enseñanza y predicción
·         Profetas mayores (Isa-Dan)
·         Profetas menores (Os-Mal)
1.       Cristo: Cabeza de la Iglesia
2.       Fundamento histórico: Los Evangelios
·         Los cuatro libros de Jesús
3.       Transición: de Israel a todos
·         (Hech 1-12) Aplicación específica: para Israel
·         (Hech 13-28) Aplicación general: para todos
4.       Enseñanza y predicción
·         Epístolas cristianas (Rom-Flm)
·         Epístolas hebreas (Heb-Apoc)